La industria de la moda enfrenta el desafío de la sostenibilidad. Shein, adaptándose a las expectativas de los consumidores, implementa prácticas responsables como el uso de materiales reciclados y tecnologías digitales. Esta combinación de sostenibilidad y moda digital redefine su modelo de negocio, promoviendo una experiencia de compra más consciente y ética.